sábado, 22 de enero de 2011

THE WIRE

Hace un momento estaba hablando por teléfono con el Filas (ya conocéis al Filas), y le estaba contando entre muchas cosas que ayer mismo me dijeron que tengo ASMA. Tuve de pequeño y se me fue, pero al parecer ahora ha vuelto. Y bueno, me tengo que cuidar por ahí ahora, no es ningún drama.
En un momento de la conversación me han entrado unos retortijones terribles en la barriga y le he dicho al Filas que tenía que colgar, que tenía que ir urgentemente al baño. Él lo ha entendido y se ha despedido diciéndome "ánimo, a ver si cagas el ASMA". Yo le he colgado rápido sin prestar atención, no he escuchado eso último, mi cabeza no podía concentrarse en otra cosa que no fuese la barriga.
Una vez en el baño, cagando, me ha llegado el mensaje. Mi cabeza ha organizado la información de manera que, al ver que había acumulación de inputs, lo mejor era poner los mensajes en fila y que fueran pasando uno tras otro, con calma, sin importar el retraso.
Entonces sí, ahí, a salvo en la taza, me ha llegado la voz del Filas diciéndome "ánimo, a ver si cagas el ASMA". He oído su voz claramente, como si mi cabeza le hubise dado al play a una grabación telefónica. Mi cerebro ha hecho un The Wire.

Entonces sí, entonces me he reído a gusto. Las bromas del Filas me suelen hacer reír un montón.

3 comentarios:

  1. Un Lester Freamon le va pillar el código a tus rutinas escatologicas

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  2. Odio la gente que dice "cuídate". Menudo dramón.
    Así que "a ver si cagas el asma" es lo mejor que te podrían haber dicho. Besos a ti y a Filas.

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  3. Mierda, me he dejado el ordenador encendido todo el día, y con el Forjando (el nuevo) abierto! Se va a cascar una buena cena de minutos el Google Analytics hoy, pero la mayoría no son en serio. Seriously.

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